el peero de caza

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    mustang
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    El perro es el gran amigo del cazador, ese compañero
    incansable que nos ayuda a conseguir que una jornada
    de caza se convierta en un día totalmente inolvidable.
    Por eso es tan necesario que seamos capaces de
    seleccionar correctamente ya no sólo la raza, sino
    incluso el ejemplar que más nos conviene.
    La oferta suele ser muy amplia y esto aumenta
    notablemente la posibilidad de equivocarnos ¿cómo
    saber qué raza se adecuará mejor al tipo de caza que
    practico?, ¿quién me asegura que ese pequeño cachorro
    terminará por convertise en un cazador implacable?
    Hemos elaborado este artículo para intentar responder a
    éstas y otras preguntas sin duda muy importantes sobre
    el tema de la elección del perro de caza.
    Sabemos que equivocarnos al elegir nuestro perro puede suponer no sólo un problema desde el punto de vista
    cinegético, sino también sentimental, porque todos les cogemos cariño…
    EL INSTINTO DE CAZA
    Todo cazador que busca un perro que le acompañe en sus jornadas de cinegéticas, quiere que éste tenga un buen “instinto de caza”; pero ¿sabemos lo que significa realmente esto?
    Se conoce como “instinto” el conjunto de caracteres innatos que predisponen a todos los sujetos de una misma especie a mostrar unas acciones típicas. Algunos instintos son comunes a todas las especies (conservación, sexual…), mientras que otros reflejan las características particulares de cada especie en particular.
    Podemos decir que el instinto determina la existencia de los seres vivos desde el primer momento de su vida, sin que
    exista ningún tipo de experiencia previa.
    El principal instinto de un perro es el de supervivencia, dentro del cual se encuentra el de la necesidad de alimento
    (nutrición), en el cual se engloba el de la caza.
    A su vez, el instinto de caza, encierra una serie de instintos “menores”:
    – Búsqueda: para la localización de la pieza.
    – Aproximación: para nosotros, sería la muestra.
    – Persecución.
    – Muerte.
    – Deglución.
    Algunos de estos instintos menores del perro han sido manipulados por el
    hombre hasta conseguir la adaptación a la caza deportiva. Así, por
    ejemplo, el instinto de deglución se ha modificado por el de cobro.
    De hecho, la gran mayoría de los problemas que podemos encontrarnos a
    la hora de trabajar con un perro nacen de la necesidad de ir contra sus
    propios instintos. Por supuesto el dueño puede, mediante un
    entrenamiento y adiestramiento adecuados, influenciar positivamente
    sobre estos instintos hasta conseguir un buen perro de caza.
    POLIVALENCIA O ESPECIALIZACIÓN
    Quizás esto es lo primero que el cazador debe plantearse: ¿quiero un perro que valga “un poco para todo” o quiero un
    especialista?
    Cuando hablamos de un “especialista”, nos referimos a que ciertas razas realizan a la perfección una determinada fase
    del proceso cinegético: cobrar, mostrar… otras razas, sin embargo, son más bien polivalentes, esto es, no llegan a
    destacar en ninguna cosa en concreto pero las realizan todas medianamente bien.
    Algunos buenos ejemplos son:
    PERROS “ESPECIALISTAS”:
    – Labrador: excelente en el cobro.
    – Pointer: especialista en la muestra.
    PERROS “POLIVALENTES”:
    – Epagneul bretón: no destaca en nada en especial, pero resulta un magnífico compañero de caza.
    Por supuesto, para poder decantarnos entre una u otra opción, deberemos tener muy claro lo que queremos hacer en el
    campo: ¿qué vamos a cazar?, ¿cómo queremos hacerlo?… plantéese ese tipo de preguntas y, lo más importante, sea
    totalmente sincero consigo mismo en las respuestas, puesto que de ellas se determinarán las características que deberá
    exigir a su perro
    CAZA MAYOR O CAZA MENOR
    Resulta obvio que las características de un perro que se dedique a la caza
    mayor difieren enormemente del que lo haga a la menor, sea cual sea la
    modalidad de caza que practiquemos en cualquier caso.
    Un perro para la caza mayor deberá tener unas dimensiones particulares (más
    grandes) y ser más resistentes, ya que se verán en la obligación de recorrer
    grandes distancias. Además y teniendo en cuenta las dimensiones de los
    terrenos donde se desarrolla la acción cinegética de mayor, será preciso que el
    perro sea capaz de mostrar una cierta independencia en la caza, ya que en
    numerosas ocasiones se verá fuera del control del propietario.
    Por lo general, existen tres modalidades de perros para la caza mayor:
    – De rastro: sabuesos.
    – De acoso: podencos.
    – De agarre: alanos.
    Estos tres tipos suelen formar las rehalas (a las cuales se les suele añadir algún
    ejemplar de mastín ligero o de galgo).
    Aquellos que buscan una raza que funcione bien para mayor y menor, deben
    saber que los giffones korthals o los bracos alemanes de pelo duro y corto son
    capaces de defenderse a la perfección en cualquiera de las modalidades.

    UNA RAZA PARA CADA CAZA
    Reproducimos a continuación un cuadro resumen con las razas en principio más comunes, el tipo de caza donde pueden
    dar mejores resultados y las especies.
    RAZA TIPO DE CAZA ESPECIES
    Galgo Corridas Liebre
    Podencos Caza al paso y caza de rastreo Liebre, Conejo, Zorro
    Podenco
    Ibicenco
    Caza mayor (rehalas) Ciervo, Jabalí
    Podenco
    Ibicenco
    Perro de gran velocidad y muy inteligente, utilizado en caza menor y también
    durante la noche (basta una luz tenue para que sea capaz de cazar como si fuera de
    día)
    Conejo salvaje
    Setter De muestra, son rápidos (baten gran cantidad de terreno), tienen un gran olfato y
    gran resistencia al cansancio. También válidos para la caza al salto o en mano. Es
    además un fabuloso nadador, por lo que sirve para la caza de aves acuáticas
    Perdiz, Codorniz,
    Becada, Faisán,
    Patos, Ánades
    Bracos De muestra. Para la caza al salto o de mano. Perdiz, Codorniz,
    Becada, Faisán
    Pointer De muestra, son rápidos (baten gran cantidad de terreno), tienen un gran olfato y
    gran resistencia al cansancio. Para la caza al salto o de mano.
    Perdiz, Codorniz,
    Becada
    Perdiguero
    de Burgos
    De muestra Becada, Perdiz
    Terrier Perro útil para adentrarse en las madrigueras Conejos, Tejones,
    Zorros
    Alanos Caza mayor al agarre
    Teckel Rastreo de piezas heridas en Caza Mayor Zorro
    Kurzhaar
    (Braco)
    Perro muy completo, fundamentalmente para la muestra Perdiz, Becada
    Cocker Perro fundamentalmente levantador (obliga a la caza a levantar el vuelo) y de
    muestra, que además no teme al agua por lo que nos puede servir para la caza de
    aves acuáticas
    Conejo, Becada,
    Patos, Ánades
    Sabuesos Perro rastreador Liebre
    Grifón Caza al salto o de mano. Además es capaz de meterse en el agua, por lo que es
    válido para la caza de aves acuáticas. También se utiliza en caza mayor, para formar
    rehalas
    Faisán, Patos,
    Ánades, Ciervos,
    Jabalís
    Mastín Caza mayor (rehalas) Jabalí, Ciervo
    Korthals Caza al rastreo Perdiz, Conejo,
    Liebre
    Drahthaar Caza al rastreo

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